martes, 18 de octubre de 2011

Periodistas con vocación y periodistas mercenarios

Cuando lees la prensa deportiva puedes darte cuenta a leguas cuál de esos señores que escriben los artículos escribe por vocación o escribe por interés. Cuál de esos señores de verdad puede aportarnos su opinión contrastada de manera objetiva y con fundamentos siempre argumentados, y cuál de ellos se dedica sólamente a mostrar la versión subjetiva e interesada del tema en cuestión, muchas veces con medias verdades o con mentiras muy bien adornadas. Podríamos incluir en esta definición incluso que muchas veces recurren al sarcasmo y al desprestigio fácil, llegando incluso a ofender con sus opiniones. El periodista objetivo, al ser simplemente un informador, nunca tiene necesidad de insultar. El que intenta imponer su subjetiva opinión, muchas veces lo hace.

Es una introducción muy extensa para la realidad que vivimos pues la prensa prácticamente está llena de ese tipo de personajes: los vemos cada día tirándose piedras mutuamente desde el puente aéreo. Personajes madridistas como Miguel Serrano, Tomás Roncero, Fredéric Hermel, José Vicente Hernáez... y personajes barcelonistas como Santi Nolla, José Luis Carazo, Lluis Mascaró y Joan Vehills que parece que si les quitases de enmedio al eterno rival no tendría material para sus artículos. Y no para agasajarlo de piropos precisamente, sino más bien todo lo contrario. Y sólo usando argumentos estúpidos, sesgados y manipulados. ASqueroso.

Pero la situación se vuelve reveladoramente curiosa cuando se produce dentro del mismo círculo de facinerosos. Dentro de él podemos ver como la información lucha desesperadamente por salir a flote dentro de un mar de intereses y manipulación. Incluso se da el caso de que ciertos personajes cambian radicalmente su opinión dependiendo del punto de vista interesado. Ésa es la situación que está pasando ahora con Del Bosque y el homenaje que intenta darle el Real Madrid.

Santiago Segurola lo explica de manera como siempre brillante en su sección del diario Marca:


" Los pretorianos mediáticos de Florentino Pérez han decidido ensuciar el nombre de Vicente Del Bosque por tierra, mar y aire. El detonante ha sido la negativa del seleccionador español a acudir a la entrega de la medalla de oro y brillantes que le ha concedido el Real Madrid. Es un rechazo que le sale del alma porque considera que la concesión no es sincera y está llena de las maquiavélicas sutilezas que convierten la distinción en una pamema.

La virulenta campaña contra Del Bosque, y las mezquinas razones que se utilizan contra él, explican su desconfianza ante una distinción que no ha merecido la llamada de Florentino Pérez, que ha delegado en un empleado del club, Emilio Butragueño, la responsabilidad en las conversaciones con el actual seleccionador español. Hasta para esa cuestión formal no se ha producido la espontaneidad que requiere una situación como ésta.

No es novedad el rechazo visceral que Florentino Pérez siente por Del Bosque. Viene de lejos, desde su primer día como presidente del Real Madrid, en el verano de 2000. La conquista de la Copa de Europa semanas antes de las elecciones obligó al nuevo presidente a mantenerlo en el cargo. Se impusieron las encuestas, siempre trascendentales en las decisiones de Florentino Pérez.

La trayectoria de Vicente del Bosque entre 2000 y 2003, su último año en el Real Madrid, está coronada por éxitos que el club no ha vuelto a repetir desde su salida. En ese periodo ganó la novena Copa de Europa, dos Ligas, una Copa Intercontinental y una Supercopa, palmarés magnífico para un entrenador que nunca recibió el reconocimiento de su presidente. Al contrario, se trasladaba la impresión de un técnico que obstaculizaba el fulgor de los célebres galácticos.

Esa fue la dura realidad de Vicente del Bosque en aquel Real Madrid, una realidad muy dura de asumir tanto por el entrenador como por el presidente, que no encontraba la manera de deshacerse del técnico. Aprovechó la eliminación del Madrid frente a la Juve –Figo falló en Turín el penalti que habría torcido la historia- para tomar la decisión que siempre deseó: no renovó a Del Bosque.

Uno de los aspectos más indecentes de la campaña contra Del Bosque es el que pretende colocarle la etiqueta de pesetero. De repente comienzan a filtrarse las cifras que supuestamente pedía Del Bosque para renovar su contrato en la primavera de 2003. En aquella época, el euro ya era la moneda corriente en España, pero la columna de exégetas de Florentino Pérez y detractores de Del Bosque se refiere a aquel contrato en pesetas. A todos los pretorianos del poder les ha dado por referirse a los 1.500 millones de pesetas que pretendía el técnico por tres temporadas, en lugar de nueve millones de euros, que era la misma cifra y además la de curso legal.

Por lo visto, es más hiriente y tiene más gancho hablar de cientos de millones de pesetas que de una cantidad que no alcanza el doble dígito en euros. No parece gran cosa que Del Bosque exigiera tres millones de euros por temporada. La recurrencia al tiempo de la peseta tiene un punto de grosería y mala uva, pero resulta cómica. Hablamos de un club que pagará 80 millones de euros –salario bruto- a Mourinho por cuatro temporadas, más los 16 millones de euros que se abonaron al Inter de Milán por su contratación. Es decir, 96 millones de euros, o 16.000 millones de pesetas, por utilizar la vara de medir que se aplica a Vicente del Bosque.

No ha sido la última vez que un entrenador del Madrid se encuentra en una posición de indefensión frente a su presidente. Durante mucho tiempo, Florentino Pérez consideró que el técnico, cualquier técnico, era una figura sobrevalorada, por no decir prescindible. Del Bosque, Queiroz y Pellegrini sufrieron ese desdén implacable. Pero en ese capítulo, como en otros tantos, Florentino Pérez tampoco ha sido coherente, hasta el punto de girar su opinión de manera radical: toda la defensa que no hizo de sus anteriores entrenadores se la ha concedido a Mourinho. Del entrenador decorativo se ha pasado al entrenador-presidente. "



El bloggero Rubén Uría también da una explicación a la situación muy objetiva:


" Una lectura superficial invita a pensar que Del Bosque se siente agraviado porque el acto ha tardado una eternidad en llegar y porque le coloca en la misma dimensión de madridismo que dos personalidades que no tienen ligazón directa con los incunables del club, como son Nadal y Plácido Domingo. Por parte de Florentino, se desliza la sensación de que el presidente del Real Madrid ha tendido la mano al que fuera su entrenador a regañadientes, atendiendo más a presiones sociales y mediáticas que a su presunto deseo personal de seguir manteniendo la frialdad con Del Bosque. La historia de desamor entre Florentino Pérez y Del Bosque tiene tantas aristas que resulta complicado efectuar una introspección medianamente objetiva sobre los reproches que uno y otro siguen guardando en su fondo de armario.

El desafecto entre Pérez y Del Bosque forma parte de un asunto feo, un episodio que marcó un antes y un después en el Real Madrid y que, curiosamente, jamás fue explicado como se merecía. Todo lo contrario, esa relación contiene versiones diferentes y confluye con intereses periodísticos
. Los satélites de Vicente culpabilizan a Florentino en privado y son muy tibios en público, pensando que la salida de Del Bosque del Real Madrid fue una canallada. Y los corifeos del presidente rehúyen el meollo de la cuestión para aferrarse a excusas referentes a las formas, sobre cómo su entrenador mareó la perdiz de su renovación de un modo que no fue acorde con el trato personal que hasta entonces le dispensó. "



Pues bien, uno de esos pretorianos mediáticos de Florentino, o como un aficionado comentó en el artículo de Rubén Uría anterior, uno de los madridistalibantes de Florentino, se llama Antonio García Ferreras. Un hombre, o un periodista por qué no, que no escribe artículos de opinión, sino que sigue trabajando a sueldo para el presidente blanco desde que dejó de hacerlo oficialmente hace unos años.

Cada vez que el Madrid en general y Florentino en particular este hombre sale para defender a capa y espada cualquiera que intente desvariar contra su Ser Superior. Ya lo hizo cuando lo del dedazo de Mourinho en el Camp Nou, donde fue capaz de decir cosas como que "puede que una provocación verbal no justifique una determinada reacción física pero sin duda ayuda a contextualizarla", y que calificó de "acto reflejo" la agresión de Mourinho a Tito Vilanova. Ahora vuelve a salir en defensa de su presidente favorito, para ponerse en contra de lo que para él es un enemigo más para su Real Madrid, cuando la realidad es que Del Bosque es uno de los mejores representantes de la filosofía madridista por el mundo:

" Vicente del Bosque no renovó como entrenador del Real Madrid por dos razones. En primer lugar, y de manera determinante, porque el técnico rechazó una oferta de renovación meses antes de que su contrato concluyera. Y en segundo lugar porque tras finalizar el campeonato, el presidente, aconsejado por varios de sus asesores deportivos, decidió no reiterar el ofrecimiento que el salmantino ya había rechazado por voluntad propia.

La propuesta de Florentino Pérez y Jorge Valdano llegó tras el partidazo de Champions frente al Manchester United. Un acuerdo de dos años de duración que triplicaba el sueldo que Del Bosque tenía cuando Florentino llegó a la Casa Blanca tras ganar las elecciones a Lorenzo Sanz.

Posiblemente estábamos, en aquel momento, ante uno de los contratos más importantes del mundo para un entrenador de fútbol. El técnico decidió no aceptar, y estaba en su perfecto derecho para no hacerlo, como en su perfecto derecho estaba Florentino para semanas más tarde no insistir en su oferta. Es inapelable que si el entrenador hubiese respondido con un 'sí' hubiese continuado y no se habría abierto el debate de su continuidad tras acabar la Liga. Sin embargo, él fue el primero en decir 'no' de manera voluntaria. Por cierto, en aquellos días muchos de los que hoy loan empalagosamente su figura clamaban en público, y en privado, por su destitución. Críticos incluso hasta con términos despectivos hacia él y su gestión de los galácticos.

El fútbol es un universo sobre todo impredecible y Del Bosque se equivocó al rechazar aquella oferta. Ahora, años mas tarde, si finalmente no acude al acto de homenaje del madridismo, no acertará. El seleccionador se ha ganado el respeto y el afecto de este país. Es un hombre bueno, de tono machadiano, y ha gestionado casi a la perfección las emociones y el inmenso talento del equipo de España. Su posición actual quizá está marcada por sensaciones que desconocemos pero que se pueden interpretar como heridas de rencor. Y con sentimientos como el rencor se vive con más incomodidad aunque la vida te trate como a un marqués. "



Las conclusiones que se pueden derivar de esas totalmente opuestas opiniones puede permitir hacer un esquema gráfico de lo que pasó con Del Bosque y Florentino Pérez hace ya 8 años.

En primer lugar, si nos ceñimos a los datos objetivos que se filtran al público a través de artículos como estos, sabemos que en último año de contrato de Del Bosque se le fue ofrecido un contrato de 2 años que triplicaba su sueldo de entonces. Ferreras no se digna a darnos una cifra sino a magnificar la situación como bien critica Segurola, diciendo que le ofrecían el triple de lo que ya cobraba y que por aquel entonces era un contrato de los más importantes del mundo para un entrenador. Segurola sin embargo aporta que, para criticar la posición de Del Bosque, filtraron que el entrenador pedía la cantidad inasumible de 1.500 millones de pesetas por año, es decir, que Del Bosque pedía cobrar 3 millones de euros al año para renovar. Si Del Bosque rechazó el contrato que le ofrecieron(en primera instancia, pues los contratos son negociables no impuestos, porque Ferreras encima nos intenta transmitir que fue el propio entrenador el que rechazó la oferta porque no quería renovar) que no llegaba a los 3 millones de euros y que triplicaba su sueldo, ¿quiere eso decir que Del Bosque cobraba menos de un millón de euros al año?

La hipocresía a la que tanto le gusta referirse Garcia Ferreras cuando habla de los rivales del Madrid podría aplicársela él mismo. Según dice él mismo, muchos de los que antes le criticaban ahora le loan. Exacto. Eran periodistas que por aquel entonces hacían el papel de comparsas de Florentino que él está haciendo ahora mismo.

¿Pero cómo pueden este tipo de periodistas vanagloriarse de un presidente que rompe moldes económicos (en tiempos de crisis, cualquiera que lo haga excepto él, llamese Abramovich o Al-Thanii, es criticado, menos el Ser Superior por supuesto) gastándose 16.000 millones (de pesetas, que para el caso vienen al pelo) en el contrato de Mourinho, otros 16.000 en fichar a Cristiano, 11.000 en Kaká... y que encima en la época en la que combatía, que no negociaba, con Del Bosque por su contrato, se gastó otros tantos en fichar a Ronaldo, Figo, Zidane y Beckham?

Este gran presidente llamado por estos fariseos el Ser Superior no consideró la contra-oferta del entrenador porque le pedía una cantidad inaudita de 4.500 millones de pesetas (unos 9 millones de euros) por tres años. Pero no, según personajes como García Ferreras, fue el propio Del Bosque el que no quiso renovar rechazando el contrato, una situación que, aunque él no quiera admitirlo, fue aprovechada por Florentino para no renovarle y quitárselo por fin de encima. Un contrato insuficiente para Del Bosque, que no llegaba a los 3.000 millones de pesetas (menos de 6 millones de euros) en dos años.

Para Ferreras, Del Bosque lo tenía muy fácil: ¿quieres seguir entrenando al Madrid? Florentino te ofreció un contrato muy bueno, culpa tuyo por no aceptarlo. Para él, no cabe ahí la opinión del propio entrenador.

A esta manipulación de números también hay que añadir la situación anímica que personajes como García Ferreras le hicieron pasar a Del Bosque en su momento. El mismo Segurola indica que sus méritos deportivos eran públicamente desprestigiados en favor de sus jugadores y en contra suya, haciendo ver que cuando el equipo ganaba era gracias a su calidad y que cuando perdía era porque Del Bosque obstaculizaba la progresión de la calidad y el talento de sus jugadores.

Anoche mismo lo confirmó Del Bosque en una entrevista del programa "El Larguero" de la Cadena Ser:

" Me lo estoy pensando. Me siento incómodo porque las palabras que pueda decir pueden ser mal entendidas. Prefiero callarme, yo no he buscado esta situación (...) Cada uno tenemos nuestra propia historia. No quiero recordar lo que pasó, pero mi familia lo pasó peor que yo. Si a uno le dicen que es un inútil y que no vale para eso... Dejémoslo... No tengo que perdonar nada ni a nadie, cada uno tiene su opinión. Es una cosa íntima, nadie se puede poner en mi lugar, yo también tengo mis principios y rarezas... "

Es decir, eso que dice Ferreras de que las sensaciones de Del Bosque están marcadas por heridas de rencor le son desconocidas a la gente es mentira. Bien saben ellos de primera mano que fue lo que Del Bosque tuvo que pasar en su abrupta salida del equipo de toda su vida. Eso de que "el grupo de asesores de Florentino le aconsejó en no insistir con la oferta de renovación que el propio salmantino había rechazado" es una excusa muy pobre que esconde entre líneas la verdad: que Florentino ofreció a Del Bosque un contrato insuficiente como medida de presión para echarlo. Con el famoso bullying todo el día sobre su cabeza.

Ni siquiera voy a entrar a valorar la hipocresía de este señor al no incurrir para nada en ningún tipo de comparación de dispendio económico ya fuera con jugadores o con la situación del contrato actual de Mourinho, porque implicaría entrar en una espiral en la que su transtornado presidente saldría perdiendo. Él y ellos mismos, los palmeros de Florentino, que se ha visto que o echando a patadas a Del Bosque o defendiendo al entrenador mejor pagado del mundo, mercenario y maleducado al que más bien poco le importa el status del equipo para el trabaja, le aplauden. Para ellos Florentino nunca ha hecho nada malo.

Ni siquiera la situación tan exagerada de que haya pasado casi un año y medio desde que Del Bosque ganara el Mundial con la selección y que todas las instituciones menos su club de origen le hayan homenajeado es capaz de transcribir a estos periodistas mercenarios la realidad entre el entrenador y el presidente, que no el club. Quieren convertir a Del Bosque en el malo de la película cuando ni siquiera ha sido el propio presidente el que le ha llamado para decirle que pretende darle la insignia de oro y brillantes, seguramente porque si fuera por él no se la daría y Del Bosque lo sabe. Pero para los coreros del presidente, es Del Bosque el que se equivoca si no recoge la insignia. Que es él el que se equivoca por guardar esos recuerdos con rencor.

Los mismos periodistas que alaban a "el hombre tranquilo", ahora no saben o no quieren entender que Del Bosque haga acopio de toda esa humildad suya para rechazar una condecoración tardía y que sólamente se hace de cara a la galería (al menos, según la opinión del propio entrenador). Porque para ellos, como siempre, el Real Madrid y el Ser Superior, no es que no haya hecho nunca nada malo, sino que es que son lo mejor de lo mejor. Y para ello se están dedicando a tirar tierra por encima de Del Bosque con filtraciones de contratos y omisión de verdades. Todo para mantener a toda costa al Real Madrid por encima de todo lo demás.

3 comentarios:

Gran artículo este Ferreras es la Central Lechera personificada.
Solo un detalle 3 millones de euros son 500 millones de pesetas, no 1500 millones como dices.
Y 4500 millones de pesetas no son 9 millones de euros,sino son 1500 millones de pesetas

vaya error por mi parte. Tenía las cifras tan grabadas en la cabeza que no me paré a pensar en que podían estar mal jaja a ver si puedo cambiarlo

De todas formas mejor me lo pones porque es aún menos de lo que yo puse...

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